28 de octubre de 2010

Green Day - y mis pedazos - en Argentina.

No venían desde el 98 y la gente esperaba un show como el que dieron. Déjenme decirles que si bien yo la pasé muy bien y me gustó mucho el show, yo iba a ver el Green Day del 98 y me encontré con otra cosa.

Y no es que no me haya gustado, creo que las bajas fueron un casi desmayo, la perdida de mi celular, un par de moretones, algo de dificultad para respirar, y un poco de frío, pero fuera de eso que me sucedió a mi, el show fue algo aparte.

Podría dividir el show en dos y decir que en un principio tocaron todos esos temas bien arregladitos de los último discos, con decirles que sobre el escenario no había nadie pero sonaba la intro del disco [tal cual] Song of The Century. A partir de ahí, sonaron 10 temas de los últimos dos discos, con un infiltrado "old school" que fue Nice Guy Finish Last

Después de esto, Billie Joe se cambió la guitarra, se colgó una celeste similar a la de Basket Case y gritó: How many old school Green Day fans are out there? Fuimos varios los que saltamos, gritamos con furia y arrancó Burnout. Sonaron temas de cuando eran tres sobre el escenario, tenían los pelos de colores y los arreglos eran casi inexistentes.

Para esto yo ya había volado de donde estaba, a metros del escenario y quedé detrás de un par de rubias altas que movían sus brazos cual recital de Luis Miguel. Sin dudarlo me moví hasta a donde alguien compartía mi emoción por los temas que sonaban, los que eramos - si se quiere -  esos "old schoo l Green Day fans" que no eramos muchos.

Así también nos tuvimos que fumar que suban al escenario una chica y un chico a cantar con la banda [los del VIP, porque había VIP] y que a ella le regalen una guitarra. Todos al unisono y sin pensarlo gritaron: "Hija de puta! Hija de puta!" con manito incluida. Y bue... También subió una chica rubia de pelo largo y el frontman le cantó una canción. Obvio, ella no dudo en abrazarlo y en cuanto se descuido le zampó un beso. 

Además en una parte del show, como bueno payasos que son, se disfrazaron todos e hicieron varios covers como Sweet child O' Mine de los Guns y Iron Man de Black Sabbath. Después de algunos temas Dookie, terminó de ser un bardo tremendo cuando con el saxo sonando a todo lo que da, tocaron King for a Day y la mecharon con Shout, Satisfaction de los Rolling y Hey Jude de los Beatles.

Y no me quedé hasta el final del show, pero al saber la lista de temas sabía como terminaba. Billie Joe sólo, con su guitarra haciendo los temas tranqui: Whatsername, Wake me Up When September Ends y Good Riddance (Time of your Life)



Y se la pasaron diciendo que era el mejor show de sus vidas, que Argentina era lo más, etc, etc... Y después en el twitter oficial dicen que se quedan con Chile. Muchos fans enojados. Yo la pase bien y volví satisfecha con el show. No me puedo quejar. Buenos Aires me recibió muy bien, como de costumbre. Volveré.

10 de octubre de 2010

De personas increibles: Mi Madre.

¿Y por qué mi vieja? Porque cuando dicen que vieja hay una sola, es verdad. 

No soy de festejar esos días cómo: día de la madre, del padre, del niño y demás. Ya dije que de mi familia, mis amigos, de todos, me acuerdo cada día del año. Escuchando música, diciendo algo que me recuerde a ellos, mirando algún personaje en la tele. Mientras tengo tiempo intento verlos a todos, mandarles un mensaje, llamarlos, pensarlos. 

Creo que muchas veces dije que me gustaría dividirme en varias partes para poder verlos todos los días, o más de lo que habitualmente lo hago, pero aún no existe la fotocopiadora de personas.

En fin. Creo que no puedo estar más orgullosa de una mujer como mi vieja. El viejo le dice: La Mujer Maravilla, es imparable. Está atenta a todos y a todo el día entero. Para mi, le pasa el trapo a Maru Botana, es una excelente cocinera aunque le pifie con las cosas dulces.  
No tiene nada que envidarle a un hombre forzudo, es tan zarpada que labura con el viejo en una metalúrgica. Si, leyeron bien, entre fierros, soldadoras y demás [y dejenme decirles que le pasa el trapo a un par que laburan ahí he!].

Podría hacer una lista interminable de hermosas cualidades de mi vieja, así como también enumerar las miles de macanas que se manda a veces,  pero sería innecesario. Me quedo con lo que me enseñó y me enseña todos los días. Con el amor que lleva en su corazón que muchos se han encargado de maltratar, pero que sigue tan fuerte como siempre. 

No se acuerden de su madre, de su padre y de los que quieren una vez al año. Demuestrenselo todos los días, hasta en la acción mínima.

Y nos movemos del rock y le regalo este tema de Argentino Luna a mi vieja, aunque no sepa ni como prender la compu y no lo vea. Mira como son las cosas.

3 de octubre de 2010

Otra que un día de furia.

Ya les conté que los colectivos de la ciudad y los interurbanos son una mierda, de hecho murió gente por esto. Pero, a pesar de todo los servicios siguen siendo los mismos: una tremenda cagada.

No tengo otra forma de llegar a la facultad desde una ciudad a la otra, no existe otro cole. Existe una traffic, para la cual, si me la quiero tomar tengo que viajar al centro, es decir que gastó casi $2 más. Y sí, son $2 chotos, pero sumando y sumando, es guita. Todo es guita.

El viernes después de mi semana del estudiante, volví a la facultad. Puse nuevamente mi vida en manos del chofer del interurbano Ko-Ko. En el camino el cole choca contra un taxi. Yo, venía muy durmiendo y con los auriculares. Me desperté y el colectivo venía tan lleno como una lata de sardinas, lleno, LLENO.

Tan lleno que el chofer pedía que los chicos salgan de las escaleras para poder bajar, y ellos muy chistosos le gritaban: ¡Hey, si necesitas ayuda los boxeamos entre todos al tachero! ¡Te hacemos el aguante! Era de esperarse que por eso llegara tarde a cursar. Y así fue.

Cuando emprendí mi regreso a casa, nos estábamos subiendo, nuevamente amontonados todo peleándose para subir primero y conseguir un asiento, uno de los chicos que estaba delante mío, mirando para atrás dice: ¡Viste que yo te dije! ¡Era chorro, estaba acá para robar!
No se me ocurrió mirar, tenía miedo, me subí al cole y comentamos lo que había pasado: Un muchacho amigo de lo ajeno le metió la mano en la mochila a una chica y el que estaba atrás lo frenó. El muchacho salió corriendo y ahí terminó todo.

No, no terminó ahí. Llegando a la terminal, donde me bajo y arriba del cole quedan como máximo 30 personas, entre que me despierto y la música, veo que alguien se levanta antes de que el cole entre. Pensé: Que nabo, si todavía falta para entrar y estacionar, pero al ser algo común, no le di mayor importancia. Veo que unas chicas que venían al lado mio hacen lo mismo, pero de la nada retroceden.

Escucho gritos: ¡Larguen todo al pasillo, los celulares, todo! ¿Vos tenés celular? ¡Dame todo la concha de tu madre! Juro que se me cruzó por la cabeza: No hacen mierda. Dejé mi cartera del lado del pasillo, pero como yo iba en el último asiento de cole, al tipo no se le ocurrió volver [por suerte].

La puerta se abrió y todos los que estábamos arriba del cole vimos como un chico, que no debe haber pasado los 25 años, corría hacia el descampado oscuro que está frente a la terminal y desaparece. Según nos dijo el chofer cuando bajamos, a nadie le pasó nada, ni le robaron, pero el susto fue terrible.

Se terminaba la semana, empezaba el mes y mi viernes fue una mierda. ¿Que lindo esta todo no? Otra que un día de furia.